La Policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) emitió más de 700 alertas preventivas y desactivó 679 sitios y contenidos a raíz del confinamiento por la emergencia sanitaria del Covid-19.

En un informe que la dependencia envió al Congreso capitalino, en respuesta a un punto de acuerdo aprobado por el pleno, refirió que en 2020 atendió, en 10 meses, 9 mil 398 reportes, 34.5 por ciento relacionados con acoso y amenazas y 33.8 por ciento con fraudes.

Apenas el 3 de febrero la corporación emitió una alerta y desactivó una página que suplantó el sitio oficial de la Secretaría de Salud capitalina para cometer fraude mediante la presunta venta en línea de tanques y concentradores de oxígeno medicinal.

En su reporte, refirió que se enviaron 47 denuncias a la Fiscalía General de Justicia capitalina y atendió 87 apoyos de colaboración interinstitucional y con empresas proveedoras de servicios de Internet.

El Legislativo solicitó a la SSC información sobre las acciones y protocolos para combatir la pedofilia y la pornografía infantil en el confinamiento por el Covid-19, y en específico la dependencia indicó que se han emitido 29 ciberalertas con medidas precautorias y recomendaciones respecto del uso de redes sociales en temas como el uso adecuado de la plataforma Zoom, identificación de noticias falsas (fake news), los mecanismos para reportar violencia en contra de menores y sitios web de venta de artículos o servicios.

La secretaría explicó el mecanismo y protocolo de atención, que incluye un servicio telefónico con personal capacitado en diversos temas, que incluyen la pedofilia y la pornografía infantil, se proporciona orientación e información y, de ser el caso, se sugiere al menor que en compañía de sus padres acuda a las instalaciones de la Policía Cibernética para dar atención presencial y de contar con datos que configuren un probable hecho delictivo, notificar a la fiscalía capitalina.

Refirió que se han elaborado 22 videojuegos didácticos con recomendaciones de prevención, reducción de conductas de riesgo y sana convivencia, difundidos vía electrónica, para menores y adolescentes, con la finalidad de mantenerlos seguros en sus casas con entretenimiento de actividades lúdicas y juegos organizados.