Tras varios meses de mantener cerrados los panteones y reforzar la medidas de ingreso durante la celebración del Día de Muertos con el fin de evitar aglomeraciones, este fin de semana los 10 que se encuentran en la alcaldía Iztapalapa abrieron sus puertas y, con previa cita, las familias pudieron visitar a sus difuntos. En los tres más grandes ayer se tuvo un registro de 374 asistentes.

La restricciones se mantienen y de acuerdo con la extensión del terreno que ocupa cada cementerio se determinó el número de personas que podían ingresar. Sólo hubo una o dos por tumba, no obstante, la cifra se redujo principalmente en los vecinales, que son de menor tamaño.

Las autoridades informaron que por la emergencia más de 200 mil personas se vieron impedidas de visitar a sus difuntos, por lo que ante la insistencia que se registró por la celebración de muertos acordaron permitir de las 8 a las 15 horas el ingreso de personas con las medidas sanitarias para evitar contagios.

De las 374 personas que hicieron su cita 127 fueron de San Nicolás Tolentino, 134 de San Lorenzo Tezonco y 113 del general de Iztapalapa, también conocido como La Cuevita; sólo nueve que programaron su asistencia no acudieron.

Durante el acceso no se reportaron anomalías y las brigadas de desinfección recorrieron los cementerios, como se ha hecho a raíz de la pandemia, en los lugares de mayor concurrencia como piletas y puertas de acceso.

Asimismo, se mantiene una vigilancia constante para evitar que se instalen comerciantes.

Para este domingo se espera una visita de 204 personas: 81 en San Nicolás Tolentino, 76 en San Lorenzo y en el general de Iztapalapa 48.

Los servicios tampoco se han interrumpido y los panteones de San Lorenzo y San Nicolás Tolentino, que son los más grandes de la demarcación, atienden funerales y la cremación de cuerpos.