Los Rayados del Monterrey consiguieron ayer su tercera Copa Mx al empatar 1-1 ante Xolos de Tijuana en el juego de vuelta, para imponerse 2-1 en el global y sumar otro título a los vigentes de la Liga y la Concacaf, como anfitriones en una noche sin público en el llamado Gigante de Acero.

Fue un partido que cobró intensidad hacia el final, en el que Montarrey, actual campeón de la liga del futbol mexicano y de la Liga de Campeones de la Concacaf, agregó otro título a sus vitrinas gracias a un penal del holandés Vincent Janssen.

Con la dirección del argentino Antonio Mohamed, que sumó su tercera corona con el cuadro regio, los Rayados ganaron la final de la copa, tal vez la última edición del torneo que disputaron clubes de la primera división y del circuito de ascenso. Rayados había ganado 1-0 el partido de ida, también con un penal, por cierto cobrado entonces por el argentino Nicolás Sánchez, quien anoche falló desde los 11 pasos en el ocaso del encuentro.

Los Xoloitzcuintles de Tijuana, dirigidos por el argentino Pablo Guede, tuvieron la primera opción clara de anotar a los 37 minutos, cuando el colombiano Christian Rivera quedó sin marca frente a la portería, pero estrelló su remate en un adversario.

Monterrey respondió a los 39 minutos con un disparo de Jesús Gallardo, que pegó en el travesaño. Un minuto después, el portero Jonathan Orozco evitó el tanto de Monterrey, cuando desvió en la línea un remate del chileno Sebastián Vegas.

Tras el gol de Janssen, hasta los 87, Tijuana empató un minuto después con un lejano disparo del argentino David Barbona, que pegó en el poste derecho antes de irse al fondo de la portería.

De esta manera, Monterrey conquistó la copa por tercera ocasión tras las ganadas en 1991 y en 2017.

A pesar de que el encuentro se jugó a puerta cerrada, fanáticos de Xolos viajaron a la Sultana para apoyar a su equipo y cientos de aficionados de ambos clubes se apostaron fuera del estadio. Las autoridades desplegaron elementos policiacos de Fuerza Civil para contener multitudes en la Macroplaza y los alrededores del estadio de Rayados, ante la crisis sanitaria por el Covid-19.