Miércoles 18 de diciembre de 2019, p. 23
El aumento al salario mínimo general fortalecerá el consumo interno y la proveeduría nacional, al elevar el poder adquisitivo de los trabajadores, aseguró José Manuel López Campos, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur).
El líder empresarial consideró que dicha alza para el año siguiente –el miningreso quedó fijado para en 123.22 pesos y en 185.56 para la frontera norte– ayudará a que la economía nacional tenga un nuevo empuje, porque los trabajadores contarán con una mejor remuneración económica que les permitirá adquirir productos básicos de consumo doméstico y personal.
Estimó que el aumento, que equivale a un ingreso casi 20 por ciento mayor a la cifra actual (102.68 pesos), refleja el compromiso de los empresarios para fortalecer la economía nacional y beneficiar a los trabajadores.
El incremento salarial tendrá impacto positivo, como sucedió en este 2019, cuando se aumentó 16 por ciento sin repercusiones o impactos en la inflación.
Por ello, el presidente de la Concanaco-Servytur aseveró que esta nueva alza a los salarios no será pretexto para elevar los precios de bienes y servicios el año próximo, porque el mercado está pasando por una etapa estable en oferta y demanda.
Esta situación, recordó, es reflejo de las condiciones macroecónomicas estables que tiene el país, resultado de una inflación inferior a 3 por ciento, por lo que se encuentra dentro del objetivo del Banco de México, así como el tipo de cambio sin deslizamientos significativos a lo largo de 2019 y una reducción de las tasas de interés.
Con el acuerdo –anunciado el lunes–, por segundo año consecutivo el poder adquisitivo de los trabajadores tendrá una recuperación, pues anteriormente los aumentos salariales sólo reflejaban la inflación. Sin embargo, el gobierno federal y el sector privado tienen la voluntad de alcanzar los niveles de bienestar para las familias de los empleados, indicó.
Añadió que ahora las empresas y los representantes de los trabajadores, junto con la administración federal, deben dialogar de forma constante para continuar con el proceso gradual del incremento salarial y la recuperación del poder adquisitivo familiar en los plazos razonables.