La falta de un padrón único de beneficiarios que evite duplicidades y dé transparencia a la entrega de apoyos, propicia el uso electoral de los programas sociales. Lo que hay actualmente es un listado de personas que recibe apoyos, pero se requiere una herramienta que garantice el uso de los recursos, sostuvo Héctor Rubio, coordinador interinstitucional de Acción Ciudadana frente a la Pobreza.

Un padrón único es la puerta de acceso a los servicios de programas, previsiones institucionales, candados, información que permite identificar a las personas que requieren ayuda para dársela y tener un control en todo el proceso, para dar seguimiento a los recursos.

A su vez, Rodolfo de la Torre, del Centro de Estudios Espinosa Yglesias, también consideró que el padrón único de beneficiarios se ha confundido con un listado de personas, y lo que se requiere es un sistema de aplicación de los recursos nacionales que sea transparente, focalizado, que evite duplicidades y vulnerabilidad al uso electoral. Todavía no existe, la Secretaría de Desarrollo Social tiene un listado de personas, no es un sistema de focalización que esté apoyado por una ley y que permita orientar los programas sociales hacia el mismo objetivo y a quienes más lo necesiten. Hay mucha discrecionalidad en el manejo de recursos .

El padrón único de beneficiarios es clave, si no se avanza estaremos condenados en 2018 a repetir esta situación y en no poner límite a los partidos que están acostumbrados a operar así, agregó Héctor Rubio.