Industriales ven difícil cerrar el año con crecimiento mayor a 1%
Lunes 4 de julio de 2016, p. 23
El entorno para los negocios en el país se ha complicado consistentemente
este año y la combinación de factores internos (como los recortes presupuestales) y externos (como la caída de las exportaciones) afecta la confianza empresarial, los planes de inversión y el ritmo de avance de las actividades manufactureras, advirtieron organismos industriales.
La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) dijo que ante el deterioro del panorama económico nacional y mundial se ve cada vez más complicada
la posibilidad de cerrar 2016 con un crecimiento superior a uno por ciento en el sector industrial, un avance muy alejado de la previsión que el organismo tenía a principios de año, la cual era de entre 2 y 3 por ciento.
Señaló que mientras la actividad industrial avanza a ritmo lento, ni el mercado interno ni la demanda externa parecen apuntar hacia un incremento en el consumo de productos industriales en lo que resta del año, por lo que difícilmente superará el crecimiento de 2015.
En su publicación mensual Pulso Industrial, difundida este viernes, la Confederación detalló que a diferencia de lo ocurrido el año pasado, cuando el lento avance del sector respondió al colapso de la industria minera (por la severa contracción de los precios del petróleo y el descenso en la producción de hidrocarburos), esta vez se contrae la actividad de los tres componentes que generan más de 90 por ciento de la producción total del sector: minería, construcción y manufacturas.
Según cifras del Inegi, en los primeros cuatro meses del año las exportaciones manufactureras se contrajeron 4.3 por ciento respecto al nivel reportado en el mismo lapso de 2015, principalmente por el descenso en las exportaciones automotrices (que cayeron 3.1 por ciento en el periodo señalado) pero también en el resto de los productos industriales (cuyo retroceso fue de 4.9 por ciento en el primer cuatrimestre).
La Concamin lamentó que los recortes presupuestales (uno por 134 mil millones de pesos anunciado a mediados de febrero y otro divulgado el pasado viernes por 31 mil 715 millones de pesos) impactará la operación de industrias como la construcción y a diversos productores manufactureros, cuya actividad depende, en buena medida, de las compras gubernamentales.
Dichos ajustes afectarán el programa de adquisiciones de bienes y servicios del gobierno federal y obligarán a la cancelación, reducción o posposición de diversos proyectos de inversión en infraestructura, así como a un recorte en los planes de inversión de CFE y Pemex, dos de los principales impulsores de la demanda procedente del sector público
, consideró.
El Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic) señaló que las medidas de política económica anunciadas la semana pasada se aplicarán en un entorno poco favorable, pues el aumento de las tasas de interés tendrá como consecuencia un encarecimiento del dinero, lo cual reducirá el consumo y la inversión privada.
Básicamente es la aplicación de una estrategia similar a la de los últimos 35 años. La que no genera crecimiento
, criticó.
Agregó que si bien el objetivo de las autoridades económicas es conservar la estabilidad macroeconómica, es un hecho que esto se hará con un costo en el crecimiento económico, algo delicado en un momento donde la desaceleración sigue profundizándose, particularmente en el sector industrial de las manufacturas
, puntualizó.