El esgrimista Daniel Gómez está convencido de su capacidad para subir al podio en Río 2016, con la intención de confirmar el progreso que logrará en sus segundos Juegos Olímpicos, a los que llegará con varias medallas de Copa del Mundo y clasificado en un puesto que permitirá una buena ubicación en el cuadro de competencia entre 40 floretistas.

El panorama se ve muy bueno en esta justa, afirmó Gómez, quien la semana pasada ganó la medalla de plata en el Campeonato Panamericano de mayores realizado en Panamá, con lo que ascendió al puesto 20 en la clasificación mundial, y como el cuadro del torneo se arma de acuerdo con esa lista, al estar a media tabla espera iniciarlo con un rival de rango similar.

Creo que me tocará un buen combate y me siento bien preparado. Estuvimos en las copas del mundo todo el año y ya estoy listo para dar lo máximo, sostuvo el capitalino tras sesión de entrenamiento en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR), donde se ha concentrado durante los casi ocho años de creada la instalación.

Claro que deseo ir por una medalla, sé que puedo lograrlo, ya he ganado copas del mundo. Los Juegos Olímpicos, no hay que hacernos los locos, son la competencia más difícil y en la que hay más presión. Por eso que sé que si todo sale bien, podemos tener un buen resultado, dijo convencido el esgrimista, quien entrena bajo la dirección del cubano Rolando Soler.

“La competencia de esgrima es rápida, todo pasa en un día, desde el primer enfrentamiento hasta el último y ganando cuatro, uno ya es campeón olímpico.

En Londres 2012 yo estaba joven y logré mi primer combate contra el triunfador del preolímpico europeo, pero en el segundo me tocó contra el tercero del orbe, un chino, y al final se me escapó por experiencia, dijo el floretista, quien terminó en el sitio 25.

Gómez, de 26 años, calcula que su primer enfrentamiento en Río podría ser ante un italiano: El chiste es analizarlo, ver cómo compite, luego el siguiente oponente y ya, seré campeón olímpico. Se dice fácil, pero sólo son cuatro, anotó el floretista, consciente de que las mayores potencias son Rusia, Francia e Italia.

Se mostró entusiasmado, no sólo por su progreso, sino por el de la esgrima mexicana, que en Brasil tendrá una participación histórica con ocho clasificados.

Hace cuatro años calificamos Úrsula González (sable) y yo. Ahora ocho son muchos en esgrima, uno de los deportes con más competidores, lo que muestra lo que estamos haciendo. Se ven los avances en medallas centroamericanas, panamericanas, copas del mundo y mundiales, anotó.