Las andanzas de El Fugas
¿Y la secretaria de Gobierno?
Bomba por estallar
a evasión de El Fugas del Reclusorio Oriente podría explicarse, desde luego, desde la experiencia y el grado de audacia de los reos, que sin sudar la gota gorda salieron de los juzgados, burlando todos los sistemas de seguridad que, se supone, funcionan en aquel centro penitenciario.
Como en muchos otros temas del gobierno de la ciudad, este, el de los reclusorios, es otro de esos en los que no se hace nada, y si bien El Fugas se les fue, la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, se le fugó al servicio público, y decimos esto porque, por ejemplo, la Comisión de Derechos Humanos de esta ciudad ya había advertido que la situación en las cárceles se estaba convirtiendo en un problema cada vez más grande y peligroso.
El organismo protector de los derechos humanos ha lanzado recomendaciones a las autoridades correspondientes, señalando la necesidad de fortalecer los sistemas de seguridad, para evitar, entre otras cosas, la evasión de los que purgan alguna condena en las cárceles de la ciudad.
Los dos delincuentes que se fueron –así de fácil– permanecían recluidos en la zona Diamante del Reclusorio Oriente, considerada de máxima seguridad
, y que recibió una recomendación porque allí se practicó tortura que llevó a la muerte a un recluso al que primero se golpeó, se metió en un tinaco de agua helada y luego se le llevó a su celda, donde fue hallado muerto a la mañana siguiente, según nos cuentan.
Pero no es todo: la recomendación 18/2015 emitida al inicio de la segunda quincena de diciembre hablaba de 40 casos de personas privadas de la libertad, quienes fallecieron de manera violenta en centros de reclusión del Distrito Federal por la ausencia del deber de custodia por parte del personal de seguridad, señala la exhortación del organismo.
Total, la secretaria de Gobierno de la Ciudad de México tenía que haber estado enterada de que las cosas se estaban pudriendo en el sistema carcelario, el director de reclusorios, Hazael Ruiz, tenía la obligación de haberlo informado y nadie trató de componer la situación, que seguía agravándose, mientras Patricia Mercado cumplía otras tareas, como fortalecer a Salomón Chertorivski como –déjeme soltar la carcajada: ja ja ja ja ja– candidato a la jefatura de Gobierno, y ella de buscar algún otro hueco en el gobierno, no importa la bandera, donde se pueda colar.
Bueno, ahora que ya sabemos que la señora Mercado sabe que en los reclusorios de la ciudad hay una verdadera cadena de irregularidades, y posibles complicidades, sería bueno que le avisara a la Secretaría de Gobierno que la bomba de los reclusorios puede estallar en cualquier momento.
De pasadita
Nos cuentan que el ex secretario de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón, Genaro García Luna, anda desesperado en busca de Alan Pulido, el futbolista, porque quiere lanzarlo al estrellato en una de sus próximas superproducciones. García Luna lo tiene todo listo, menos el nombre del superhéroe que llevará el futbolista. Eso, es visión cinematográfica.
Así es que no duden que dentro de algunos días salga alguna convocatoria para darle nombre al superhéroe mexicano, y para construirle el garaje con el que saldrá, si su equipo lo permite, a combatir a los secuestradores del país. Vamos ahí, Pulido.
Por cierto, sabían que Felipe Calderón chocó su camioneta hace algunos días en Quintana Roo. Se dijo, después del incidente, que lo habían impactado –hay que aclarar que él iba manejando– y nadie se explica por qué su vehículo tiene el golpe del choque en la trompa. Lo curioso es que el accidente casi pasó inadvertido, lo que no sucedió cuando el ex delegado de Iztapalapa también chocó una camioneta y el escándalo fue mayúsculo. ¡Qué suerte la de Calderón! ¿O no?