La noticia del secuestro del futbolista Alan Pulido se difundió ayer domingo en diversos medios internacionales como Marca y El País, en España; Clarín, en Argentina; El Tiempo, de Colombia; Ta Nea, de Grecia, y The Washington Post, en Estados Unidos.

De igual forma, el conjunto de los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León, con quien Pulido ha vivido una controversia por su relación laboral –que incluso ha llegado a tribunales–, expresó su solidaridad con la familia del deportista ante la difícil situación que atraviesa.

Por su parte, la Liga MX manifestó: ‘‘La familia del futbol se une a la solidaridad con Alan Pulido y deseamos que todo salga bien’’. Asimismo, el cuadro griego Olympiakos, donde milita el futbolista mexicano de 25 años de edad, expresó que ‘‘en este momento difícil nuestros pensamientos y oraciones están con Alan’’.

Jugadores como Javier Chicharito Hernández, quien milita en el Bayer Leverkusen; Guillermo Ochoa, del Málaga; Jesús Corona y Miguel Layún, del Porto, y Diego Reyes, de la Real Sociedad, mostraron ayer su pesar por el secuestro de Alan Pulido. Ochoa, portero de la selección mexicana, pidió ‘‘mucha fuerza y solidaridad’’ con la familia de su compañero.

A su vez, Jared Borgetti, máximo goleador en la selección de México y jugador internacional en la Liga Premier con el Bolton, aseguró que jamás padeció la ‘‘paranoia’’ de ser un personaje público en un país con graves problemas de seguridad.

‘‘La vida te cambia porque la situación económica se hace diferente; empiezas a vivir mejor, a tener una buena casa en un mejor barrio, compras un buen carro; sí hay cambios, pero uno trata de seguir normal’’, expresó.

Después de la noticia del plagio de Pulido, en redes sociales abundaron comentarios que criticaban al jugador del Olympiakos por circular sin escoltas. Para Borgetti, rodearse de guardaespaldas es una protección apenas ilusoria. ‘‘Aunque traigas escolta o lo que sea, si te quieren hacer daño van a traer dos o tres veces más de lo que tú traes’’, dijo.

‘‘Esto sucede (los casos de secuestro) no sé cada cuánto en el país, pero cuando le pasa a una persona pública tiene más resonancia y hasta adquiere notoriedad mundial. En muchísimas partes del mundo ya se sabe esto que le pasó a Alan Pulido y nos deja mucho peor de lo que de ya de por sí se piensa de México.’’