El duopolio televisivo pierde el control del balón
Otro negocio de los dueños de clubes
lgo que parecía imposible se está convirtiendo en realidad en los torneos recientes: el duopolio televisivo está perdiendo el control del balón.
Hasta hace un par de años, ante la complacencia de la Federación Mexicana de Futbol, las dos televisoras llamadas públicas se repartían a su placer e interés los equipos del máximo circuito: cuando un equipo descendía, la cadena que lo transmitía negociaba (es un decir) con el club que lograba el ascenso en esa temporada.
Así, los clubes quedaban entre la espada y la pared, ya que tenían que aceptar lo que la televisora les ofreciera... hasta que llegó Grupo Pachuca con Carlos Slim y empezó a romper las reglas.
León y Tuzos se salieron del control televisivo del duopolio y firmaron con Fox Sports; después, Leones Negros negoció con ESPN, pero sólo estuvieron un año en primera, víctimas de su falta de gol y de unos errores arbitrales que parecían tener línea para perjudicarlos; luego los también ya descendidos Dorados pactaron con TVC Deportes, pero esa señal está muy limitada y pocos los pudieron ver.
La desbandada puede continuar para el próximo Apertura 2016, ya que el Querétaro negociará con Tv Azteca para tratar de liberarse del contrato que aún tienen para que los Gallos puedan ser transmitidos por la empresa dueña del club, Grupo Imagen Multimedia. Esta misma señal podría adquirir los derechos de difusión del Puebla, que durante toda la campaña que ayer terminó, sus partidos de local en el remodelado estadio Cuauhtémoc fueron exclusivamente por Sky, lo que molestó a los patrocinadores poblanos.
Pero el caso que podría sentar precedente es el de las Chivas, que a cuentagotas han ido informando sobre la forma en que transmitirán sus encuentros. Hasta ahora se sabe que la señal que transmitirán por Internet y será en pago por evento, pero Jorge Vergara aseguró que la podrán ver también por otros medios los aficionados de pocos recursos económicos.
En caso de que estos cinco clubes (León, Pachuca, Querétaro, Puebla y Chivas) sean transmitidos por medios diferentes, el duopolio perdería casi 30 por ciento del mercado futbolero que antes dominaba por completo.
Y ahora ya muchos dicen que lo siguiente sería que la selección nacional también saliera de ese control, pero es poco probable que el duopolio deje ir la joya de la corona... a menos que a Slim le surja interés por el Tri, como lo tuvo por los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y le ganó la carrera a Televisa y Tv Azteca.
Como se esperaba, los dueños del futbol aprobaron la regla 10-8 para la próxima campaña, lo que en síntesis representa quitar el límite de extranjeros en nuestro balompié. Entrevistado por La Jornada, Ignacio Cuate Calderón observó que esto sólo es un negocio más de los muchos que tienen los hombres más ricos del país: comprar talento sudamericano barato, foguearlo en el torneo local y venderlo caro a las ligas europeas.
Los propietarios de clubes han encontrado jugadores jóvenes con cualidades –sobre todo en Colombia y Ecuador, donde no cuestan tantos dólares como en Argentina y Brasil–, y después de un par de campañas en México despiertan el interés europeo. El último caso fue el del ecuatoriano Enner Valencia, quien ha sido la transferencia más cara del balompié nacional, en un monto cercano a 24 millones de dólares.
Con cantidades así, que los grandes perjudicados sean los jóvenes mexicanos, es lo de menos.
Por otra parte, el nuevo presidente de los Pumas, Rodrigo Ares de Parga, llegó con la guillotina afilada y cesó de inmediato al técnico Guillermo Vázquez y al directivo Antonio Sancho, en despidos que parecen injustos luego de lo conseguido por ambos elementos de extracción universitaria, lo que precisamente se le reprocha que adolece el nuevo dirigente.
