Vecinos de la delegación Coyoacán denunciaron hostigamiento por las autoridades delegacionales mediante la suspensión del Instituto Cultural Educativo Coapa, a la que funcionarios exigieron cumplir medidas de protección civil como si se tratara de un establecimiento de alto impacto y cometer abusos contra personal del Centro de las Artes Santa Úrsula (Casu), el cual es destinado cada vez más a actividades privadas.

Marcos Fuentes Franco, propietario y representante legal de la escuela suspendida, sostuvo que esto es a raíz del activismo que la comunidad ha mantenido en contra de desarrollos inmobiliarios y en particular por su rechazo a la Zona de Desarrollo de la Planta de Asfalto, así como por la oposición de los trabajadores del Casu al proceso de privatización de dicho espacio público.

Tras reunirse con diputados de la Asamblea Legislativa a los que expuso ambos casos, Fuentes Franco, acompañado de un grupo de vecinos, explicó que el Casu, que da servicio a unas 500 habitantes de la comunidad de Santa Úrsula, tiene instalaciones en malas condiciones que se han negado a atender, incluso una plaga de pulgas en uno de sus espacios, con el argumento de que no hay presupuesto.

Denunciaron además despidos y hostigamiento a los trabajadores que se oponen a que frecuentemente se rente el espacio para actos privados, así como porque existe acoso sexual contra jóvenes talleristas.

La delegación determinó colocar sellos de suspensión al exigir medidas como si fuéramos una fábrica o nos dedicáramos a vender alcohol.