Ante la demanda vecinal, la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial (PAOT) solicitó a las autoridades de la delegación Coyoacán y del gobierno capitalino que efectúen nuevos estudios sobre la calidad del agua que mana de un venero en el predio de Aztecas 215, en el pueblo de Los Reyes, donde se suspendieron las obras de construcción de un conjunto habitacional.

Después de efectuar una primera inspección, personal de la PAOT constató el avance de la obra y la inundación del terreno, por lo que resolvió que para realizar los análisis por parte del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y de expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se tomarán muestras en tres momentos diferentes: antes, durante y después de la extracción del agua estancada en el predio.

Para ello, el organismo solicitó a la dirección general de Jurídico y Gobierno de la delegación Coyoacán que instruya que se lleven a cabo las acciones legales para retirar los sellos de suspensión, exclusivamente para permitir el ingreso y las diligencias al personal a cargo de la investigación, pertenecientes al Sacmex y a la UNAM.

A finales de abril, los vecinos del pueblo de Los Reyes presentaron una denuncia por daño ambiental ante la PAOT, debido al desperdicio de miles de litros de agua que, procedentes de un venero, eran canalizados al drenaje con el fin de secar el terreno, donde se construyen tres torres de departamentos.

Desde el año pasado, los residentes advirtieron a las autoridades sobre la presencia de un vaso hídrico en el terreno, el cual afloró tras la excavación que realiza la desarrolladora inmobiliaria para comenzar la edificación del estacionamiento subterráneo.

El Sacmex ya había tomado muestras y realizó estudios sobre el agua que mana en el terreno, cuyos resultados arrojaron que el líquido no era potable. Sin embargo, los vecinos solicitaron que se llevaran a cabo nuevos análisis.

Las excavaciones profundas que se realizaron en el predio de Aztecas 215 también han provocado hundimientos en los terrenos aledaños y agrietamientos en las viviendas cercanas.

Desde el 29 de abril, los inconformes se instalaron en plantón para exigir la cancelación de este proyecto inmobiliario y la expropiación del predio por causa de utilidad pública.

En el conjunto habitacional se pretenden construir 377 departamentos en tres torres, que se cotizan desde un millón 600 mil hasta 2 millones 200 mil, con superficies entre 54 y 76 metros cuadrados.