Viernes 27 de mayo de 2016, p. 27
Ise-Shima, Japón.
Los líderes del Grupo de los Siete países más desarrollados (G-7) expresaron este jueves su preocupación por los riesgos para el crecimiento de la economía global y en particular de las emergentes, durante la cumbre anual del grupo, en la que su anfitrión, el primer ministro japonés, Shinzo Abe, hizo una comparación con la crisis financiera global de 2008 y llamó a los líderes a evitar una crisis similar.
Los riesgos para la economía mundial continúan pese a las señales de un crecimiento estable, dijo la canciller alemana, Angela Merkel, quien agregó que los bajos precios de las materias primas son un problema para muchos países.
En el primer día de la cita en esta ciudad del centro de Japón, los líderes de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido intentarán acordar posiciones comunes en temas de economía y seguridad global.
Los líderes del G-7 expresaron la opinión de que las economías emergentes están en una situación grave, aunque hubo puntos de vista de que la situación económica actual no es una crisis
, dijo Seko después de la primera jornada de dos días.
Caen precios de materias primas
Abe presentó datos que mostraron que los precios mundiales de las materias primas cayeron 55 por ciento desde junio de 2014 hasta enero de 2016, el mismo margen que se registró entre julio de 2008 y febrero de 2009, tras el colapso de Lehman Brothers. Lehman era el cuarto mayor banco de inversión de Estados Unidos, cuando se acogió a una protección por suspensión de pagos el 15 de septiembre de 2008. Su quiebra –la mayor en la historia de ese país– desencadenó la crisis financiera global.
Abe señaló que los jefes de Estado y de Gobierno del G-7 coincidieron en la necesidad de tomar medidas fiscales para estimular el crecimiento mundial, en función de las condiciones económicas de cada país, dijo a la prensa Hiroshige Seko, secretario adjunto del gabinete.
Durante la cita, el G-7 tiene previsto adoptar una declaración que destacará la importancia de las medidas fiscales, monetarias y estructurales para reactivar la economía global.
En la agenda también están temas como el Acuerdo de Asociación Transpacífico y las actuales negociaciones para un acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Japón; la lucha contra la corrupción y la evasión fiscal, a raíz de la filtración de los papeles de Panamá. Los líderes hablarán también de la lucha contra el terrorismo, el programa nuclear norcoreano, la posible salida del Reino Unido de la UE, la crisis de los refugiados y el cambio climático.