Rafa no combate desde hace tres años
Martes 17 de mayo de 2016, p. a15
Es cruel, pero a veces un peleador no puede negarse a enfrentar a un rival que ya debería estar retirado, dice Jhonny González con la resignación de un boxeador que asume el oficio con disciplina laboral.
Es un trabajo y no puedo negarme a pelear si el rival (Rafael Márquez) tiene trayectoria y se siente capaz de enfrentarme
, agrega.
Márquez protagonizó junto a Israel Vázquez combates memorables y sangrientos en la década pasada, peleas consideradas históricas en Estados Unidos pero que les dejaron huellas terribles. Vázquez se retiró por una lesión en la retina que ponía en riesgo su vista; Márquez –también fue operado de un ojo– empezó a acumular derrotas y no pelea desde hace tres años, pero quiere despedirse del boxeo con un reto repleto de riesgos.
Jhonny reconoce que en el deseo de Márquez siente la ilusión de despedirse ante mí y cumplir su sueño de seguir peleando
, comenta pero sin eludir: Hay un gran amor al boxeo que hace que no reconozcan cuándo decir adiós y que es momento de buscar otra profesión
.
Simplemente admite que si hay un arreglo peleará ante Márquez, como antes hizo con Jorge Travieso Arce, aunque deportivamente le aporten poco, pues lo que en verdad tiene en mente es recuperar un título mundial.
Un legado los respalda
Ellos también han dejado un legado que los respalda; por eso, si se sienten aún con capacidad, que merecen una oportunidad de este tipo.
Esa ilusión –admite– conlleva un riesgo real, pero el deseo de seguir peleando les impide verlo, darse cuenta de que en el boxeo el peligro es verdadero.
Cuando Jhonny piensa, a sus 35 años, que su final en los cuadriláteros tampoco es muy remoto y podría replicar este tipo de historias, entonces titubea.
Por ahora tampoco recala en esa posibilidad. Los boxeadores terminan así, derrotados por la edad y la necedad de seguir en combate.