Vecinos de la colonia Valle Escondido respaldaron la decisión de la jefa delegacional de Tlalpan, Claudia Sheinbaum, de suspender la obra de Rubí 38, donde se pretenden construir 409 viviendas, al considerar que se trata de un desarrollo inmobiliario plagado de irregularidades que, además, impactaría aún más la zona, ya colapsada en materia vial y con desabasto de agua.

Acusaron que los promotores de este conjunto habitacional han hecho de los plantones una práctica común para obligar a las autoridades de distintas dependencias a otorgarles los permisos para dicha obra.

En un comunicado, recordaron que desde 2013 han documentado las irregularidades en esta construcción en que se ha incurrido mediante distintas argucias legales, sin que ninguna autoridad escuche la demanda vecinal de detener los trabajos, hasta que se logró con el cambio de administración en la delegación.

El domingo pasado distintas organizaciones sociales, entre ellas el Bloque Urbano Popular (BUP), instalaron un plantón frente a la sede delegacional, que derivó al día siguiente en agresiones en contra de la delegada y su equipo de trabajo para exigir, entre otras peticiones, la revisión de la obra en Rubí 38.