Monterrey, NL.

Los Rayados fueron más certeros y ganaron 3-1 en el primer partido de cuartos de final de la liguilla ante Tigres, en el estadio Universitario. Un marcador demasiado abultado que será difícil revertir este sábado, en el duelo definitivo en casa de La Pandilla.

El conjunto de la UANL presionó y tuvo la posesión del balón la mayor parte del tiempo, pero los contragolpes y la eficacia en la definición dio la razón al Monterrey.

Carlos Sánchez abrió el marcador al minuto 15 por los Rayados y la cuenta la ampliaron Dorlan Pabón (38) y Rogelio Funes Mori (83). Por los felinos anotó Rafael Sobis (19).

Los descuidos de Tigres fueron capitalizados por los Rayados. Un saque de banda creció de manera insospechada. Edwin Cardona atrajo toda la atención y funcionó para dejar solo a Sánchez, quien ante el arco recibió la pelota para empujarla con absoluta comodidad y abrir el marcador.

La respuesta de los felinos fue precipitada y el arquero Nahuel Guzmán hizo una salida temeraria que casi le cuesta el segundo tanto al cuadro universitario. El portero salió hasta la media cancha y cuando regresaba a su meta estuvo a punto de ser sorprendido por un tiro de Cardona de casi 30 metros ante la portería abierta, pero para su fortuna se fue ligeramente desviado.

Sin embargo, la presión de Tigres logró equilibrar el juego de inmediato. Al minuto 19 Sobis recibió la pelota en la media luna, la bajó con el pecho y mandó un tiro imparable para lograr el empate.

Tigres tuvo un respiro y apretó el ataque. Pasada la media hora seguía pisando el área de los Rayados, pero sin definición.

Cuando parecía que Monterrey estaba asfixiado, de pronto salió en un contragolpe. Sánchez envió un centro que llegó a Dorlan Pabón, quien desde afuera del área recetó sin posibilidades para Nahuel Guzmán y logró el 2-1.

Tigres se fue al descanso con la desventaja y con la cara adusta de su entrenador, Ricardo Ferretti, quien no soltaba la tabla para ensayar jugadas y planteamientos.

El conjunto universitario volvió buscando acortar la diferencia, pero se precipitó en los remates con Jesús Dueñas y el francés André-Pierre Gignac.

Con todo y el asedio, Monterrey estuvo a punto de repetir el contragolpe con el que consiguió la ventaja. Pabón mandó el balón a Sánchez, quien tardó en decidir cómo resolver la oportunidad.

Después los Rayados volvieron a salvarse. Con todo Tigres encima, en un remate de cabeza Guido Pizarro estuvo cerca de marcar, pero el tiro llegó a manos el arquero Jonathan Orozco.

Gignac volvió a la carga, pero la zaga estaba atenta a cualquiera de sus amagos. La defensiva rayada apretó y dejó el ataque felino sin posibilidades.

Además, Orozco estuvo en el momento adecuado ante un remate de palomita de Hugo Ayala que el portero rayado atajó.

Otro contragolpe de Monterrey complicó la situación de Tigres. Al minuto 83 el tiro estuvo a punto de salir de la cancha, pero Édgar Castillo salvó con las uñas para enviar el centro a Rogelio Funes Mori, quien de media vuelta asestó el 3-1 en favor de los Rayados.