Save the Children presenta campaña sobre educación sexual
Viernes 6 de mayo de 2016, p. 31
En México una de cada dos adolescentes de entre 12 y 19 años se embaraza a causa de una violación, porque se casó o debido a que no recibió información integral, según la organización Save the Children.
Al presentar ayer la campaña Hasta el último niño y niña, María Josefina Menéndez Carbajal, directora ejecutiva de esa agrupación, señaló que la pobreza, los estereotipos de género y la falta de información enfocada a esa problemática son otras causas por las que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) considera a México como el país con la mayor tasa de embarazos entre adolescentes.
De 2006 a 2014 se reportaron casi 100 mil partos de madres menores de 15 años. De ellos, 394 fueron de niñas de tan sólo 10 años de edad y ocurrieron en esta administración, resaltó Menéndez Carbajal. Aunque no hay datos sobre el tema, se asume que en la mayoría de esos embarazos hubo coerción o violencia
, apuntó en una conferencia de prensa que se realizó en la Casa Lamm.
La campaña durará tres años y ofrecerá información a niñas y adolescentes con la finalidad de prevenir embarazos a temprana edad, indicó. Con ella se hace un llamado al gobierno mexicano a destinar más dinero para evitar ese fenómeno que va en aumento y a hacer transparentes los programas que diseñe para ese objetivo. A funcionarios y sociedad en general se solicita no discriminar a las madres jóvenes.
Poco acceso a métodos anticonceptivos
Cuando las niñas o adolescentes se casan la educación sexual que han recibido es escasa y tienen poco acceso a métodos anticonceptivos, señaló Menéndez Carbajal. Quince por ciento de las que se unieron en 2011 tenían entre 12 y 18 años. Chiapas, Guerrero y Veracruz son las entidades en las que los matrimonios infantiles superan 40 por ciento del total de los enlaces, de acuerdo con la organización.
Más de 53 por ciento identifica a la escuela como el lugar donde reciben información sobre sexualidad. Sin embargo, no hay un programa escolar que pueda ser evaluado para saber si se cumple con el cometido de prevenir, añadió. Es necesario un cambio cultural
para que la familia se involucre más en ofrecer orientación al respecto.
El sistema educativo enseña sobre sexualidad desde una perspectiva reproductiva y se termina por asociarla a un problema, admitió Claudia Alonso Pesado, coordinadora operativa de Políticas del Sistema Nacional de Protección Integral de Niños, Niñas y Adolescentes.
En cambio, dijo, tendría que instruirse tomando en cuenta el bienestar; es decir el placer, la diversidad y la identidad
.