Viernes 8 de julio de 2011, p. 9
París. Una confección arrebatadora y muy usuable sería el resumen de los desfiles de alta costura para el otoño invierno 2011/12 que hoy concluyen en París. Hasta el glamur y el esplendor que distinguen al diseñador libanés Elie Saab, quien mostró el miércoles sus propuestas, parecían contenidos. Su colega Jean Paul Gaultier, el eterno enfat terrible del mundo de la moda presentó una inusual contenida colección incluso para sus propios estándares. Con la palabra kikiriki
traducida en varios idiomas mostró unas propuestas con numerosas referencias del mundo del ballet, ensalzando la ligereza de las plumas, presentes en su colección de forma constante. De paso promovió su nuevo perfume para hombres. Se llama Kokoriko (la versión francesa del Kikiriki
).