Ejercicio editorial donde prima la imaginación artística de la fotógrafa Graciela Iturbide (Distrito Federal, 1942), el libro México-Roma, que incluye imágenes captadas por la artista mexicana en esas ciudades, se comenzó a distribuir en México.

Iturbide narra en el volumen una historia de las capitales italiana (capturadas en 2007) y mexicana (entre 1974 y 2009) en 50 fotografías, relato que explora esas urbes como personajes, a diferencia de sus trabajos previos, donde predominaban las presonas.

Diseñado por Anna Sánchez, México-Roma se originó en la exposición del mismo nombre que se presentó en el Museo Archivo de la Fotografía, en la capital mexicana, en agosto de 2009.

Con un tiraje de 500 ejemplares, distribuido por editorial RM, esta edición independiente reúne características artesanales peculiares: el título fue escrito por la autora en etiquetas obtenidas en Bolivia, narra una historia en imágenes y casi carece de texto (sólo contiene dos breves escritos y alguna información técnica).

Permite dos lecturas, a manera de espejo: para la primera México, con 25 imágenes, se pueden pasar las páginas de derecha a izquierda; en la segunda, Roma, se recorren las 24 páginas de forma inversa, para terminar con una ilustración central en la plenitud del papel.

Un poema, A las ruinas de Roma (1617), de Francisco de Quevedo, abre la sección dedicada a la ciudad europea: ...en tu grandeza, en tu hermosura,/ huyo lo que era firme,/ y solamente lo fugitivo permanece y dura.

El apartado en torno a la capital mexicana describe el encuentro en 1519 de Moctezuma y Hernán Cortés con estas palabras: ...no lo veo en sueños, no estoy soñando../ es que ya te he visto,/ es que ya he puesto mis ojos en tus ojos...