Los secretarios de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa; de Economía, Bruno Ferrari, y de Agricultura, Francisco Mayorga, llamaron al Senado a ratificar urgentemente los acuerdos de libre comercio con Colombia y aprobar el de Perú, pero los legisladores de PRI, PRD y PT respondieron que el gobierno no ha escuchado al sector agropecuario, que sería uno de los más afectados en esas negociaciones comerciales.

Espinosa sostuvo que durante años México estuvo a la vanguardia en materia de intercambios gracias a los tratados de libre comercio que establecimos con los países de América, Europa y Asia. El mundo cambia rápidamente, y lo que ayer parecía adecuado y suficiente hoy ya no lo es.

Subrayó que hoy otras naciones se abren al comercio y rivalizan con nosotros en la oferta de bienes y servicios. Hay una erosión acelerada de la ventaja comparativa que tenía México a finales del siglo pasado, como resultado de la apertura de más países.

Ferrari defendió los acuerdos comerciales. “El tratado de libre comercio con Colombia es el más exitoso de todos los que ha firmado México. Las exportaciones a esa nación se han multiplicado por 12, al pasar de 306 a 3 mil 757 millones de dólares. Han crecido mil 100 por ciento.

Y las importaciones se multiplicaron por 6.5, al pasar de 121 a 795 millones de dólares. México tiene un superávit comercial con Colombia de casi 3 mil millones de dólares, 16 veces mayor al que teníamos antes de este tratado, destacó.

Las ventas a Colombia generan 94 mil empleos, con un salario promedio mensual de 8 mil 750 pesos. De profundizarse este tratado, en los próximos cinco años se generarían 60 mil fuentes laborales adicionales y las exportaciones ascenderían a 9 mil millones de dólares. Seguir demorando este acuerdo da fuerza también a las voces en aquél país que solicitarían cancelarlo por considerarlo particularmente benéfico para México.

En su oportunidad, el secretario de Agricultura explicó que de la nueva negociación (luego de que Venezuela se retiró del tratado) se excluyeron productos altamente sensibles para México, como plátano, café, azúcar y alcohol etílico. Se logró acceso inmediato para huevo fértil, tomate, garbanzo, trigo duro, jugos de naranja y tomate, concentrados de frutas y hortalizas.

Los senadores priístas Heladio Ramírez, Amira Gómez y Alfonso Elías advirtieron que de no atender los reclamos del sector agropecuario, el tricolor valorará la pertinencia de la firma de los tratados.

Rosario Green, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, aseveró en todo acuerdo existen sectores beneficiados y afectados. En el caso específico de los tratados con Colombia y Perú, los productores rurales han reiterado con claridad sus objeciones.

Su homólogo priísta Heladio Ramírez, presidente de la Comisión de Desarrollo Rural, pidió a los funcionarios retomar el diálogo con los productores. ¿Por qué no encuentran un camino para que juntos, nos lleven al Senado soluciones y tengamos un instrumento para aprobarlo? También les sugirió: Los conozco, sé de su trabajo, y sé que responden fielmente al Presidente de la República, pero uno, como colaborador, también tiene derecho a decirle que está equivocado, por el bien de México.

El petista Ricardo Monreal refirió que un estudio de la Fundación Rafael Preciado, del PAN, señala que el sector agropecuario es el que se vislumbra más vulnerable con Brasil, Perú y otras naciones. Subrayó que el estudio dice más: no hay claridad de que la firma con otros países sea una opción que convenga, y dado el grado de apertura comercial con México, es más recomendable buscar aprovechar mejor los acuerdos que ya tiene.

El perredista Antonio Mejía refirió que el TLC con Estados Unidos y Canadá trajo efectos devastadores para el campo. Más de 400 mil campesinos emigran por esta situación hacia Estados Unidos. “¿Para qué continuar con este síndrome de trataditis?. ¿Para qué seguir exponiendo de manera peligrosa a nuestros productores?”

Ferrari sostuvo: la profundización del tratado con Colombia tiene como ganador al sector agropecuario. Hay sectores sensibles que tenemos que atender, pero hay cosas que deberíamos investigar.