Habrá un Medio Oriente sin espacio para Estados Unidos ni para Israel
Sábado 12 de febrero de 2011, p. 21
En el mundo árabe, la noticia de la renuncia del presidente egipcio, Hosni Mubarak, detuvo el tránsito en las calles de Túnez e hizo que decenas de libaneses celebraran con champaña en Beirut; pero en Argel, la celebración organizada por opositores al presidente Abdelaziz Buteflika –en el poder desde 1999– fue disuelta a golpes por la policía.
¡Mubarak se fue. Esperamos que el próximo sea Buteflika!
, gritaron miembros del partido Unión para la Cultura y la Democracia, antes de que los agentes arremetieran contra ellos y arrestaran a 10, en la víspera de una gran marcha contra el gobierno, que desde hace 19 años impuso el régimen de excepción.
El retiro de Mubarak suscitó la reacción de varias organizaciones políticas de la región, destacando la perseverancia del pueblo egipcio.
Esta debe ser una lección para muchos regímenes árabes que utilizan los mismos métodos (represivos) contra sus pueblos
, dijo la Hermandad Musulmana de Jordania. Es el comienzo de la victoria de la revolución egipcia
, dijo el movimiento de resistencia islámica de Palestina, Hamas.
Los felicitamos por la victoria de su revolución, que posibilitará a Egipto encarnar de nuevo el nacionalismo árabe y al pueblo controlar sus riquezas
, dijo a Afp un representante de los comités revolucionarios libios, columna dorsal del gobierno de Muamar Kadafi.
Desde Teherán, el presidente iraní Mahmud Ajmadineyad celebró con una declaración: Al final van a conseguir la dignidad y la victoria y habrá un nuevo Medio Oriente donde no habrá lugar para Estados Unidos ni para el régimen sionista
de Israel.
En Tel Aviv, el gobierno guardó silencio, aunque un funcionario que pidió no ser identificado expresó su confianza en que la transición sea pacífica. En días pasados manifestaron su preocupación por un ascenso al poder de la Hermandad Musulmana.