El primer año de este gobierno la canasta básica subió 35 por ciento
Critican sindicalistas al “presidente del empleo precario
y salarios miserables”
Carolina Gómez y Patricia Muñoz Ríos
un año cuatro meses de gestión del actual gobierno, sindicatos y especialistas en temas laborales coinciden en que Felipe Calderón “sí es el presidente del empleo, pero del empleo precario y de los salarios miserables”. Señalan que lo ocurrido en lo que va del sexenio lo confirma y los ejemplos sobran.
Uno de ellos es que, lejos de castigarse y suprimirse la terciarización laboral, ésta se “tolera” y se pretende “legalizarla” con la reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT). Añaden que la mayor parte de los empleos que se ofertan no ofrecen la totalidad de las prestaciones de ley. En cuanto a remuneraciones, tampoco satisfacen las necesidades más apremiantes, ni alcanzan a cubrir el monto de la canasta básica; en suma, son “trabajos miserables”, expresan centrales obreras.
Por lo anterior, señalan, México queda rezagado en el contexto regional y aún más en el global. En promedio, el aumento al salario mínimo ha sido de 3.95 por ciento, y el de los contractuales se encuentra entre 4 y 4.5. Asimismo, los topes salariales en los dos últimos años son de 4 por ciento en 2007 y 4.25 este año.
Cabe señalar que el incremento al minisalario en 2007 fue de 3.9 por ciento y para 2008 de 4. Esto contrasta con las alzas que han tenido los productos de primera necesidad. Tan sólo en el primer año del actual gobierno la canasta básica subió 35 por ciento.
Arturo Alcalde Justiniani, abogado laboral, precisó en entrevista que la política en materia de salario y empleo es “fantasiosa y pensada nada más en la lógica de las variables macroeconómicas”. Apuntó que mientras en materia de creación de empleos se ofrecen “cuentas alegres y contradictorias”, se insiste en contener el salario, lo cual “es un error porque para fortalecer la economía y el mercado interno el salario debe ser el centro de la estrategia de despunte”.
En cuanto a creación de empleos, el litigante comentó que Felipe Calderón “es el presidente del empleo, pero del empleo precario”, en lo cual coincidió Benito Bahena, líder de la Alianza de Tranviarios de México y el Frente Sindical Mexicano (FSM).
Alcalde refirió que de los “800 mil empleos” que el gobierno asegura que creó durante su primer año de gestión, en realidad “a lo mucho llegan a la mitad, porque el mismo INEGI lo ha desmentido, pero se insiste en “probarlo con cifras del Seguro Social, las cuales realmente no indican cuántos empleos nuevos se crearon”.
Para Benito Bahena, Calderón, lejos de ser un presidente que favorece a los trabajadores los presiona con “salarios miserables” y prestaciones exiguas, y ha continuado la línea de que la riqueza del país se reparta sólo entre “unos pocos”. Por eso, dice, defiende a capa y espada la contención salarial.
A su vez, el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), el Frente Sindical Mexicano y la Coalición de Trabajadores del INEGI opinan que México padece “un grave retroceso en materia de empleo y salario, porque las promesas de campaña sólo quedaron en eso; este gobierno presenta los peores resultados económicos y menores aumentos salariales de las últimas décadas, además de que manipula la información” en dichos rubros.
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Empleo, la cantidad de población desocupada se ha mantenido ligeramente estable, pues el año pasado arrancó en un millón 747 mil 929 personas, de un universo de población económicamente activa (PEA) de 44 millones 148 mil 391, y cerró en el cuarto trimestre de 2007 en un millón 616 mil 81, de una PEA de 44 millones 447 mil 32. Pero según sindicatos y expertos en el tema, la realidad puede ser mucho más “dura”, puesto que el gobierno tiende a “maquillar” las cifras de desempleo y a colocar en el rubro de ocupados a personas que reportan haber trabajado una hora a la semana.
En febrero de este año, el gobierno federal, a través de la Secretaría del Trabajo, aseguró que había una “tendencia a la baja en el desempleo nacional”. Al dar a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Empleo del cuarto trimestre de 2007, expuso que la PEA representaba 59.7 por ciento de la población que está en edad de trabajar, “un máximo histórico para dicho indicador gracias al elevado ritmo de incorporación de la población en actividades productivas”.
En este contexto de “cifras alegres”, como las catalogan las centrales obreras, la dependencia reportó que la “dinámica de generación de empleo favoreció la disminución de la tasa de desocupación, que fue de 3.54 por ciento de la PEA, inferior a 3.6 del mismo periodo (cuarto trimestre) de 2006”.
El 19 de marzo de este año, la STPS afirmó que “se redujo la desocupación en el mes de febrero de 2008”, y en este caso ventiló cifras del IMSS. “Durante el segundo mes del presente año el mercado laboral prosiguió su desempeño favorable; el registro de trabajadores en el Instituto Mexicano del Seguro Social presentó un crecimiento de 84 mil 492 asegurados, con lo cual se alcanzó un total de 14 millones 828 mil 385 trabajadores permanentes y eventuales urbanos”.
También reportó que la tasa de desocupación en febrero fue de 3.81 por ciento de la PEA, y que la de enero ascendió a 4.06, lo que significó una “disminución de más de dos décimas”. |