Río blanco de personas anhelantes de energía se aposentó en la ciudad de los dioses
Decrece la afluencia para recibir el equinoccio en Teotihuacán
En 2005 acudieron 800 mil y este año se estiman cerca de 600 mil, informó Rogelio Rivero Chong, director de la zona arqueológica
Hoy se espera captar más de $5 millones en taquilla
Ampliar la imagen Decenas de personas conquistaron la cima de la Pirámide del Sol para permanecer sólo cinco minutos y cargarse de energía durante la llegada del equinoccio de primavera Foto: Mario Antonio Núñez López
Por primera vez y en día festivo, la zona arqueológica de Teotihuacán cobrará 45 pesos para las personas que deseen ingresar a la ciudad de los dioses que este día 21, según estimaciones de Rogelio Rivero Chong, director del sitio, serán entre 200 y 300 mil como máximo.
Anteriormente, el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Luciano Cedillo, había dicho que de lo recaudado, tomando en cuenta las exenciones para determinados grupos, representará ''80 por ciento'' de los que tendrán acceso gratuito.
De ser así las estimaciones, sólo el día 21 el INAH obtendrá por el pago en taquilla alrededor de 5 millones 400 mil pesos. ''Aunque la afluencia será de aumento exponencial" subrayó Rivero Chong. No obstante, el arqueólogo había manifestado la semana pasada que se recibirían cerca de 350 mil personas este martes.
Con nuevas medidas y operativos de seguridad para salvaguardar los vestigios prehispánicos, se esperan más de 600 mil personas ''durante el fin de semana largo, que se contempla desde el pasado viernes y hasta el 22, día en que también hay una notable presencia de visitantes", explicó el titular de la zona prehispánica, quien dijo también que ha habido una notable disminución de visitantes, aunque descartó que fuera por el cobro de 45 pesos. ''Como es un puente largo las personas tal vez prefirieron viajar a otros lugares."
El domingo, añadió, pese a ser gratuito, acudieron alrededor de 17 mil personas, y ''este lunes estimamos una cifra de 20 mil''.
Con la cifra ''exponencial" de este martes, Rivero Chong expresó que el número total de visitantes en días previos y posteriores al equinoccio ascendería ''a más de 600 mil, en seis días".
Abundó: ''El año pasado se recibieron alrededor de 800 mil personas, pero en ese fin de semana coincidieron la Semana Santa y el equinoccio".
De acuerdo con las modificaciones a la Ley Federal de Derechos, que entraron en vigor el pasado enero, del nuevo cobro -antes de 38 pesos, con excepción de los días festivos- estarán exentos las personas mayores de 60 años y los menores de 13; también los jubilados, pensionados, discapacitados y profesores y estudiantes en activo no pagarán boleto. Además se incluyen los pasantes e investigadores que tengan permiso del INAH para realizar estudios relacionados con los museos, monumentos y zonas arqueológicos.
Otras de las zonas clasificadas en tarifa triple A son Palenque, el Templo Mayor; los museos nacionales de Antropología y de Historia, éste en el Castillo de Chapultepec; además de Teotihuacán, Monte Albán, el Museo de las Culturas en Oaxaca, Tulum, Cobá, Uxmal, El Tajín y Chichén Itzá.
Nada de limpias
En Teotihuacán miles de manos se alzaron de manera simultánea para volverse una sola, en punto de las 12:26 horas, para recibir el equinoccio de primavera, justo en la cima de la Pirámide del Sol, desde la que se podía observar un río blanco de personas anhelantes de energía que colmaron la ciudad de los dioses.
Los 246 escalones de esa pirámide no fueron impedimento para los miles de visitantes que ascendieron hasta la cúspide y desde ahí entonaron cantos y rezos para pedir por su salud y bienestar económico o mirar el horizonte.
Desde temprana hora, miles de personas se dieron cita en la zona arqueológica de Teotihuacán. Poco antes de la entrada de la primavera, un fuerte viento refrescó a los visitantes.
Con las restricciones impuestas por el INAH para no permitir hacer limpias dentro de la zona, los olores del copal, incienso, pirul, romero y ruda fueron casi imperceptibles.
El objetivo era conquistar la cima de la Pirámide del Sol, justo a la hora en que sería la entrada del equinoccio de primavera, pero sólo algunos tuvieron ese privilegio.
Roberto Venecia, de Buenos Aires, Argentina; Florencia Bantiuegna y Luis Omar Bernal, de Bogotá, Colombia, fueron algunos de los extranjeros que por primera vez fueron testigos de ese ritual en Teotihuacán.
De igual foma, la Pirámide de la Luna también fue invadida por los visitantes.
Esta vez hubo un novedoso dispositivo de seguridad. Se cerró un tramo de 800 metros de la Calzada de los Muertos y en su lugar la circulación fue por un camino pavimentado.
El director de la zona arqueológica, Rogelio Rivero Chong, explicó que eso se hizo para evitar algún deterioro en pisos, vestigios, pintura mural o el desprendimiento de rocas.
También desde ayer, las diversas corporaciones policiacas federal, estatal y municipal, así como unidades médicas de urgencia montaron un operativo con más de 2 mil elementos.