Está plagado de errores jurídicos y viola el derecho internacional, advierten
El ALCA, un "esfuerzo imperfecto" que acentuará la pobreza: expertos
Investigadores de diversas instituciones señalan que resultará "ominoso" para México
LA JORNADA DE ORIENTE
Puebla, Pue., 3 de diciembre. El Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) es un esfuerzo imperfecto, plagado de errores jurídicos, lagunas y violaciones al derecho internacional, que bajo esas circunstancias lejos de generar bienestar económico acentuará las condiciones de discriminación y pobreza, expusieron investigadores y académicos al participar en el congreso regional El acuerdo sobre el ALCA: peligros y oportunidades.
Durante su participación, Héctor de la Cueva, coordinador de la Alianza Social Continental (ASC), dijo que para México resulta "ominoso y no promisorio" el futuro una vez que se firme ese tratado comercial, pues se excluye sistemáticamente a la sociedad civil con el único propósito de ofrecer condiciones favorables para el crecimiento de las empresas multinacionales, en detrimento del medio ambiente, la cultura y la estabilidad de sectores productivos.
Werner Voigt, académico de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), comparó el segundo borrador del acuerdo continental con "un animal" que posee contradicciones y que además carece de definiciones elementales como el concepto de "economía pequeña". Algunas de sus características reflejan que será una extensión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), advirtió.
En la conferencia titulada Desventaja del ALCA para México, el investigador de la Universidad Iberoamericana Golfo-Centro, León Opalin, sostuvo que el acuerdo es insuficiente para mejorar las condiciones económicas de América Latina y el Caribe debido a que en el documento están ausentes temas como el control de la migración, el pago de la deuda externa de economías emergentes, el medio ambiente y la aportación de recursos para crear fondos de aliento al desarrollo.
El proyecto así planeado y discutido, dijo, es inviable, pues no ofrece soluciones a los conflictos estructurales que atraviesan casi la totalidad de las naciones que negocian, a excepción de Estados Unidos y Canadá. Sin duda, apuntó, acentuará el periodo recesivo de las economías de la región.
"Para México las ventajas del ALCA son limitadas; de hecho son casi en su totalidad desventajas las que deberá enfrentar si se concreta, pues es, como se ha dicho, un extensión del TLCAN", puntualizó.
Héctor de la Cueva, coordinador de la Alianza Social Continental, expuso que si no hay una representación de la sociedad civil en las negociaciones del ALCA es porque los gobiernos participantes excluyeron al pueblo. Pero aun cuando le abrieran las puertas, señaló, se negarían al diálogo no por oponerse de forma sistemática, sino porque para un acuerdo benéfico se requiere antes un cambio en el modelo económico que impera en la mayoría de las naciones.
El ponente afirmó que las autoridades mexicanas han ocultado los resultados de las negociaciones, pues llevan el proceso a espaldas de la ciudadanía. Consideró que no hay condiciones para pensar en resultados óptimos al entrar en funciones el tratado, si se concreta.
Aliento a capitales especulativos
Por su parte, los investigadores Jaime Estay Reino y Marcos Gutiérrez Barrón coincidieron en afirmar que la desregulación del flujo de inversiones que se prevé concretar mediante el ALCA tiende a crear capital especulativo en las naciones emergentes, en lugar de fomentar una mejoría en las condiciones de vida de la población del hemisferio, lo cual será un elemento de inestabilidad social para el continente.
Estay Reino, académico de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), manifestó que en el capítulo de inversiones del tratado continental existe una clara intención de poner a este documento por encima de las legislaciones locales en aras de otorgar un beneficio a los poseedores de capital. Habrá un aumento de la especulación, pues los gobiernos participantes no podrán exigir nada a quienes decidan invertir en uno de los territorios de las partes signantes. Un ejemplo, dijo, consiste en que un empresario estadunidense podrá instalar su fábrica en Latinoamérica y contratar trabajadores asiáticos o de su mismo país.
Además tendrá derecho a transferir sus recursos en cualquier momento a otra de las naciones que integran el ALCA, sin que ello represente una dificultad para el empresario, aunque irá en detrimento de la estabilidad económica de aquel país que pierda la inversión. Esa estrategia que tratan de fraguar los negociadores, expuso, es una virtual garantía para permitir la fuga de capitales.
Asimismo los gobiernos firmantes estarán impedidos para expropiar o nacionalizar bienes de inversionistas extranjeros del mismo continente, pues de lo contrario serán acreedores a sanciones que se estipularán en el documento final del acuerdo; esto sin contar que en los estados donde haya "conflictos sociales graves o guerras" las autoridades tendrán la obligación de compensar económicamente al inversionista por las pérdidas que genere un disturbio social.