Lunes 7 de enero de 2002 |
| n El aumento decretado por la CNSM dificultará las negociaciones |
| Divergen IP y obreros por aumentos a salarios mínimos |
José Carlos Avendañon |
| Mientras el sector obrero considera que el 6.9 por ciento de incremento a los salarios mínimos es únicamente la referencia, pero no la expectativa final, para negociar los contratos colectivos de trabajo, la industria de transformación se pronunció por que los aumentos a las minipercepciones se den en un marco de justicia y apegados a la capacidad económica de cada una de las empresas instaladas en la entidad. |
| éstas son las
posturas del presidente del Congreso del Trabajo (CT) en
Tlaxcala, Eduardo Vázquez Martínez, y del dirigente de
la Cámara Nacional de la Industria de Transformación
(Canacintra), Mario Bracamonte Zardenetta, en torno al
incremento que deben tener los salarios mínimos en el
presente año. En entrevistas por separado, el dirigente obrero asentó que el 6.9 por ciento que decretó la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CNSM) sirve como referencia, pero no es la expectativa final de las negociaciones, dado que los sindicatos han planteado un aumento entre el 18 y 20 por ciento. Vázquez Martínez aseveró que ni el 10 por ciento de aumento los hubiera dejado satisfechos, porque el poder adquisitivo de los trabajadores se ha deteriorado desde hace varias décadas y recuperarlo es difícil; por ello, los sindicatos negociarán prestaciones laborales sólidas para que los agremiados tengan estabilidad económica. Al igual que el secretario general de la Federación de Trabajadores de Tlaxcala (FTT), Pascual Grande Sánchez, el presidente del CT dejó entrever que el 6.9 por ciento de aumento autorizado por la CNSM dificultará las negociaciones con la parte patronal, pues mientras los sindicatos piden más allá de 20 por ciento entre salario y prestaciones, los empresarios toman como referencia el índice inflacionario de 2001. Si bien el incremento a los minisalarios no es el que esperaba el Congreso del Trabajo, "al menos nos coloca por arriba del porcentaje de la inflación del año pasado", reconoció. En tanto, el presidente de la Canacintra Tlaxcala aseveró que el 6.9 por ciento es sólo un marco referencial, ya que no constituye un indicativo determinante para los salarios contractuales. "En las revisiones hay que tomar en cuenta la capacidad económica de la empresa y la productividad de los trabajadores, así como sus necesidades para mejorar el nivel de vida", enfatizó. Mario Bracamonte Zardenetta apeló a una actitud ética entre las partes patronal y laboral durante las negociaciones, pues a pesar de que ambas siempre buscarán la defensa de sus intereses, "es importante cuidar el desarrollo económico que debe tener el estado de Tlaxcala". |