Lunes 7 de enero de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n Entre ellos, Manuel Bartlett Díaz, Diego Fernández de Cevallos y Carlos Arredondo
Conservadores del PAN y el PRI quieren frenar la investigación de desaparecidos políticos: Ortega
q Además del Ejército Mexicano y las élites económicas de la República

Fermín Alejandro García n

Luis Ortega Morales, en 1968, fue uno de los tres delegados poblanos del Consejo Nacional del Huelga, cuyos integrantes fueron reprimidos en la plaza de Tlatelolco el 2 de octubre de ese año. Desde su perspectiva, ahora más que nunca hay posibilidades de esclarecer la matanza de la plaza de las Tres Culturas y el asunto de los desaparecidos políticos durante la guerra sucia de los años 70 y 80. Sin embargo, advierte, hay fuerzas conservadoras del PRI y el PAN, representadas por los senadores Manuel Bartlett Díaz, Salvador Rocha Díaz y Diego Fernández de Cevallos, que buscan frenar las investigaciones.
Pero no sólo ellos, advierte en una entrevista con La Jornada de Oriente, sino también ex integrantes de la oposición y del Partido Comunista (PC) que se pasaron al PRI, que al ingresar a las filas del tricolor "asumieron como suya la historia y la política de ese partido político".
Un claro ejemplo es el actual procurador de Justicia del estado de Puebla, Carlos Arredondo Contreras. En los años 70 fue "un distinguido miembro del PC, desde donde combatió a los gobiernos del PRI y luchó por el esclarecimiento de la muerte de Joel Arriaga".
Ahora, como titular de la Procuraduría General de Justicia y destacado miembro del PRI, Arredondo se ha negado no sólo a investigar la muerte del luchador universitario -asesinado en 1972-, sino que ha impedido a Judith García, viuda de Joel Arriaga, el acceso al expediente del homicidio de su esposo, agregó.

Perdió el PRI
Durante una entrevista realizada en un café del Centro Histórico, Ortega considera que la aparición -en Proceso y La Jornada- de fotografías y datos inéditos del movimiento de 1968, así como la decisión del gobierno de investigar el asunto de los desaparecidos, fue resultado de la derrota que el PRI sufrió en los comicios presidenciales del año 2000.
"Hay un hecho muy simple, el Partido Revolucionario Institucional perdió el poder y la capacidad de control de la información policiaca y gubernamental que durante décadas mantuvo en secreto. Esa información es tan fuerte que muchos priistas necesitan deslindarse de esa responsabilidad, no quieren cargar con la culpa. Al PAN y a Vicente Fox les interesa aclarar el pasado con fines electorales".
Pero también hay miembros de las fuerzas conservadoras que no quieren que cambie el estado mexicano, que buscan frenar cualquier intento de investigación. Entre ellos se encuentran -señaló los senadores priistas Manuel Bartlett Díaz y Salvador Rocha, así como el panista Diego Fernández de Cevallos. Una muestra de ello fue la alianza que signaron cuando se hizo la reforma indígena en materia constitucional para frenar la iniciativa de la Cocopa, que era respaldada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
También hay reticencias del Ejército y viejos militantes de izquierda, que después se volvieron priistas o panistas, así como de las élites económicas que serían afectadas si se abre los expedientes del Fobaproa, y por tanto no quieren que se esclarezca hechos del pasado.
A ello obedece el financiamiento que estas élites brindan a fuerzas políticas durante los procesos electorales, observó.
Pese a ese panorama, Luis Ortega Morales considera que ahora más que nunca hay posibilidades reales de esclarecer lo ocurrido en el movimiento del 68 y la guerra sucia, por la situación democrática que hay en el país, en la cual hay una rebelión de las bases priistas contra muchas de las decisiones y actitudes de sus dirigentes y de gobiernos anteriores, como fue lo concerniente con la represión.
Por eso, los legisladores del tricolor no apoyarán la propuesta gubernamental de gravar alimentos y medicamentos con el Impuesto al Valor Agregado, añadió.
También Vicente Fox Quesada y el Partido Acción Nacional necesitan deslindarse de ese pasado, pues, considera, "no podrá haber una alternancia real en el poder político si no se rinde cuentas con el pasado".
Aunque la parte más importante, destacó, es que si la sociedad civil no presiona a Vicente Fox para que cumpla con su responsabilidad de Estado de investigar los asesinatos y desapariciones forzosas por razones políticas, es posible que se impongan las fuerzas conservadoras.