Miércoles 2 de enero de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
Trama Financiera

El segundo piso del periférico

n Mario Villar Borja

Don Rodolfo, le sugiero leer a quienes piensan diferente, y gracias por la diversión. Lástima que haya sido tan corta y que su concepción sobre el debate consista en lanzar diatrabas a quienes considera sus adversarios y no discutir sobre conceptos, historia o aspectos de relevancia social.

El jefe del gobierno del DF ha anunciado su decisión de llevar a cabo una obra monumental consistente en la construcción del segundo piso del periférico y el viaducto, por lo cual ha recibido innumerables críticas, la mayoría de ellas injustificadas. En consecuencia en la presente se trata algunos aspectos que podrían resultar relevantes al proyecto.
Este proyecto es una situación adecuada para llevar a cabo una consulta ciudadana entre los ciudadanos del Distrito Federal, que tan buen criterio mostró en la deliberación sobre el incremento en el costo del pasaje del metro, a pesar de que no fueron debidamente informados. Desde luego que ahora sí se debería proporcionar información suficiente a la ciudadanía, para que tome la decisión correcta. Explicación que debería incluir el costo de obra, la procedencia de los recursos con los que se financiaría y de su costo, las molestias que resultarían en su construcción, el tiempo de su edificación y algunos otros aspectos relevantes. Pues aunque "en la ciudad de la esperanza, los compromisos (sí) se cumplen", no como el Presidente Fox quien no presentó compromisos, sino sólo una serie de slogan de una más de sus campañas publicitarias, demostrando que los políticos no tienen palabra, o cuando menos los del PAN no.
Esta obra podría ser monumental y tener efectos sociales de gran envergadura, si su destino fuera el transporte masivo de personas, de tal manera que con ésta se redujera el costo, en tiempo y en recursos, de tal transporte público de personas en el Distrito Federal. Pues si como aparentemente se pretende esta obra se destina al servicio de autos particulares, el problema de contaminación que sufre el Distrito Federal, no recibiría más que otro paliativo y en el largo plazo se crearían problemas en la gran urbe, con un costo muy alto para las generaciones futuras.
La actitud del gobierno de López Obrador es magnífica, pues ha mostrado una verdadera solidaridad republicana con el pueblo al no incrementar los salarios de los altos funcionarios, y el gasto corriente, y no como el presidente Fox que ha enseñado lo contrario, empezando por él mismo con gastos suntuarios en toallas, sábanas e incrementos en su propio salario en más del cien por ciento (en sólo un año), mientras que al salario mínimo se pretende otorgar este año sólo un incremento de dos pesos diarios (4 por ciento). Francamente, una gran diferencia de actitud entre estos dos gobiernos, unos del partido de la democracia y otro del partido del "cambio"... de virrey.
Feliz año 2002, claro, eso será posible sólo si los tecnócratas que nos gobiernan deciden hacer algo por el pueblo y no sólo para los de su estirpe.