VIERNES Ť 30 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Entregan el Reina Sofía por la restauración del edificio dominico del siglo XVII

Bermúdez soslaya la relevante labor de Toledo y Pro-Oax en el ex convento de Santo Domingo

Ť Injusto, presentar el proyecto como una iniciativa de gobierno, dice Alejandro de Avila

Ť La funcionaria asegura que el pintor juchiteco fue ''un filósofo de la ciudadanización''

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 29 de noviembre. La histórica restauracion del ex convento de Santo Domingo de Oaxaca, que después de más cien años de ocupación del Ejército Mexicano se convirtió, en 1998, en un centro cultural de referencia en México, recibió hoy el Premio Internacional Reina Sofía de Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural.

Fue la reina Sofía quien hizo entrega del galardón a la presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Sara Bermúdez, quien a su vez destacó la voluntad política de los gobiernos federal y estatal y de Fomento Cultural Banamex para concluir esa ingente labor, lo que provocó profunda molestia en los representantes de la sociedad civil oaxaqueña, al subrayar que fue la sociedad encabezada por el pintor Francisco Toledo la que logró evitar que el ex convento dominico se convirtiera en hotel, como pretendía el gobierno del entonces mandatario local Diódoro Carrasco, y la que impulso con fervor la idea de crear en ese recinto un centro cultural.

El ex convento, construido por frailes dominicos en el siglo XVII y que desde entonces ha sido expoliado y destruido de manera sistemática por las guerras y la incuria de las autoridades, experimentó a partir de 1994 una obra restauradora que logró la reconstruccion idéntica del edificio original, al menos como lo detalló en las crónicas de la época Francisco Burgoa.

Juan Urquiaga fue el responsable de la restauración y quien encabezó al equipo de especialistas que hurgó en el pasado para respetar al máximo la forma original del edificio, lo cual valió ganar la primera versión del premio (dotado de 30 mil dólares).

La historia de la restauración del ex convento es tan compleja como surrealista, pero si por algo se ha caracterizado ha sido por la polémica. Tres años después de abrirse allí el centro cultural y con un galardón internacional como colofón, el debate se agudiza entre el Patronato Pro Defensa y Conservación del Patrimonio Cultural y Natural de Oaxaca (Pro-Oax) y las autoridades federales y estatales de México.

Soslayan labor pionera de Pro-Oax

Bermúdez, al recibir el premio, destacó que ''tras una amplia consulta y un generoso acuerdo de colaboración entre instituciones públicas y privadas se inició la restauración de ese imponente conjunto del siglo XVII; fue entonces cuando el CNCA, presidido por Rafael Tovar; el Instituto Nacional de Antropología e Historia, dirigido por María Teresa Franco; el gobierno del estado de Oaxaca y Fomento Cultural Banamex acordaron el destino del inmueble como centro cultural después de una consulta pública que buscó establecer un diálogo que permitiera incorporar la visión y las expectativas ciudadanas sobre el inmueble. A este esfuerzo pronto se sumó Pro-Oax encabezado por el destacado artista Francisco Toledo, fortaleciendo con ello la presencia de la sociedad civil''.

La lectura de Bermúdez cayó como hielo entre los representantes de Pro-Oax, entre ellos Alejandro de Avila Blomberg, director del Jardín Etnobotánico del Centro Cultural Santo Domingo, quien señaló que se faltaba a la verdad al negársele el reconocimiento que tuvo en este caso concreto la movilización de la sociedad para evitar un desastre en el patrimonio histórico del estado de Oaxaca.

''Estamos muy molestos porque nos parece muy injusto que se haya presentado la iniciativa de conservación de Santo Domingo como si hubiera sido generada por las autoridades federales culturales de México. Esto no fue así. Bermúdez expresó que Pro-Oax se 'sumó muy pronto' al proyecto, pero esto fue literalmente al revés'', explicó, y añadió que fueron el INAH y el CNCA los que ''callaron'' cuando se pretendía convertir en hotel el ex convento mientras ''nosotros alzamos la voz y creo que es justo que eso se reconozca''.

Al preguntársele a Bermúdez por qué su discurso subrayó más la ''voluntad política'' de los gobiernos que la participación de la sociedad en ese proyecto, la funcionaria explicó que el gobierno de Vicente Fox pretende ''la ciudadanización de las políticas culturales, por supuesto que Francisco Toledo y su fundación fueron importantísimos, no sólo en este rescate sino todo lo que ha hecho en el estado de Oaxaca; fue uno de los filósofos de esa ciudadanización y gran ejemplo para nosotros''.

Sin embargo, señaló el representante de Pro-Oax, ''está en el aire, dependiendo de qué tan en serio se nos tome en adelante para que participemos en otras iniciativas'' con el gobierno, pues resulta ''contradictorio'' que por un lado se hable de ''ciudadanización de la cultura'' y por otro se soslaye a la sociedad civil en este tipo de reconocimientos internacionales.

Cuando De Avila explicaba a la prensa su malestar, Bermúdez lo interrumpió y le dijo que se fuera con ella a la cena que ofrecía la reina Sofía a los galardonados, a la que por cierto no estaba invitado, pero a pesar de la insistencia de la titular del CNCA rechazó la invitación, que más parecía un pretexto para alejar de los micrófonos al representante de Pro-Oax.