Ť Critica el cardenal a quienes se valen de ella para alcanzar poder terrenal
Absurdo establecer una religión de Estado, dice Norberto Rivera
Ť Nadie quiere la imposición de un ateísmo con el pretexto de un laicismo, señala el arzobispo
Ť Califica de "acto de desesperación" de la gente el linchamiento de una persona en Tlalpan
ANGELICA ENCISO L.
El
cardenal Norberto Rivera Carrera aseguró que sería absurdo
establecer una religión de Estado, pero también dijo "que
nadie quiere la imposición de un ateísmo con el pretexto
de un laicismo". De esta forma respondió al debate desatado en los
últimos días en torno a la presencia de figuras religiosas
en oficinas públicas.
Entrevistado al término de la tradicional homilía dominical en la Catedral Metropolitana, el arzobispo primado de México abundó sobre el tema y señaló que "nadie se debe valer de la religión para alcanzar poder terrenal".
El prelado también se refirió al caso del linchamiento de Carlos Pacheco Beltrán, porque presuntamente robó una imagen religiosa de la iglesia de Santa María Magdalena Petlacalco, en la delegación Tlalpan. Dijo que la arquidiócesis de la ciudad de México ya se había pronunciado por el rechazo a la violencia; "creo que esos robos son parte de la violencia, pero una violencia más criminal es asesinar a una persona".
La Iglesia, precisó, no puede aceptar esto. "Creo que los feligreses expresaron algo en lo que no encontraron eco en la justicia humana. Yo creo que es un acto de desesperación. Yo lo podría calificar en ese sentido". Este hecho, indicó, debe investigarse y "no se puede hacer un juicio desde aquí".
En Petlacalco no comulgaron
Mientras tanto, en el pueblo de Magdalena Petlacalco, los feligreses no pudieron comulgar porque el cura encargado de oficiar la misa principal del domingo los exhortó a arrepentirse por el linchamiento y, literalmente, se rasgó las vestiduras.
Ante la reacción del cura, varias mujeres sollozaron y un grupo de habitantes arremetió contra los representantes de los medios de comunicación hasta correrlos de la parroquia.