* Pretexto para aumentar el número de soldados en Chiapas, dicen indígenas


Mentira del gobierno, versión de posibles ataques zapatistas

* Rechazan autoridades que haya algún operativo especial contra el EZLN; insisten en ejercicios tácticos

Hermann Bellinghausen, enviado, San Cristóbal de las Casas, Chis., 17 de diciembre * Con extrañeza, indignación o burla recibieron los municipios autónomos el bombardeo electrónico del procurador estatal, Eduardo Montoya Liévano, la noche del 15 y la mañana del 16 de diciembre, en el sentido de que habría "ataques" de zapatistas a "quienes no comulgan con su ideología", a partir del próximo día 20, en distintos puntos de la entidad.

Desmentida con celeridad por el secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, la especie difundida por el procurador estatal puso en acción a la Policía Judicial y las tropas del Ejército federal.

"Nosotros nomás estamos esperando la sociedad civil que va a venir a nuestras fiestas de fin de año", dijo un vocero del municipio autónomo San Pedro de Michoacán, sorprendido de las noticias radiales.

En el mismo sentido se manifestaron voceros de distintas comunidades autónomas, según información recabada por La Jornada durante un recorrido por algunos de los municipios señalados y en comunicados de éstos a los medios.

Mientras en las esferas gubernamentales las informaciones seguían siendo contradictorias, los voceros de las comunidades rebeldes coincidieron en que eran "las mentiras del gobierno", como lo expresó un campesino del municipio Tierra y Libertad, en la región fronteriza de la entidad. "Es su pretexto para aumentar los soldados alrededor de nuestras comunidades".

Ante el señalamiento de que habría agresiones de "zapatistas radicales" en Chenalhó y Las Cañadas de Ocosingo, el concejo municipal de San Pedro Polhó reiteró que ellos esperan realizar el cambio de autoridades el próximo 22, el mismo día en que se conmemora el segundo aniversario de la masacre de Acteal.

 

Ahora, "zapatistas contra priístas"

El procurador Montoya Liévano, acompañado por el arquitecto de la propaganda informativa alborista, el coordinador de Comunicación Social, Manuel de la Torre, sugirió la posibilidad de un ataque similar, sólo que ahora por zapatistas contra priístas. Una de las comunidades que prepararían dicho "ataque", según el procurador, sería Acteal precisamente. Sin embargo, en dicha comunidad sólo preparan la celebración memorial, para el día 22.

Aunque la movilización militar es evidente en distintos puntos de la zona de conflicto, el gobierno federal rechaza que se prepare algún operativo especial contra el EZLN. El obispo de Tuxtla Gutiérrez, libre de toda sospecha de simpatizar con los rebeldes, también negó estas noticias. "En Chiapas no hay alerta roja como se pretende difundir a través de los medios, son rumores", declaró Felipe Aguirre Franco en referencia al anuncio de Montoya Liévano de que se establecería un estado de alerta a partir de esta semana, quien también pidió el apoyo del Ejército federal y la PGR.

El subsecretario de Operación Regional de la Secretaría de Gobierno chiapaneca, Arturo López Guillén, afirmó que hay tranquilidad en los municipios "donde los pobladores temen posibles ataques por parte de un ala radical del EZLN".

A la vez, el Ejército federal desplazó varios centenares de soldados de otras partes del país para reforzar los nueve agrupamientos que ocupan los territorios en que se asientan los 38 municipios autónomos rebeldes. Por aire y por tierra, llegan estos días a Chiapas las tropas de refuerzo destinadas, por lo menos, a 10 municipios indígenas.

Incremento de la movilización de tropas

 

Representantes del pueblo autónomo de Amparo Agua Tinta, rodeados por el Ejército federal y amenazados por los priístas armados que controlan la comunidad con el respaldo de la seguridad pública, aseguraron que la presión militar ha crecido paulatinamente. También denunciaron "la maniobra del señor Elías Méndez Agueda en el grupo de priístas que sigue manipulando" (pues éstos se dividieron), para hacerse pasar por presuntos desertores zapatistas "con el fin de que les dé algo el señor Albores Guillén".

Según los campesinos de Amparo Agua Tinta, del municipio autónomo Tierra y Libertad, "los priístas necesitan el nombre zapatista para que les den algo, pensando que el zapatismo está por limosna o migajas del mal gobierno". Y concluyeron:

"No existe ningún desertor zapatista en nuestra comunidad, sólo unos priístas manejados por Elías Méndez".

Durante el recorrido por distintos municipios, este enviado fue retenido hasta por media hora en numerosos puestos de control del Ejército federal.

No obstante que en todos los casos los efectivos castrenses negaron la existencia de algún estado de excepción, el diario local Cuarto Poder informó hoy que las nuevas tropas "descienden vía aérea por el aeropuerto militar de Copalar, localizado entre los municipios de Comitán y La Trinitaria, considerado como punto estratégico para atacar en minutos a la comandancia zapatista. Por ferrocarril, lo hacen en la ruta de Palenque, para de ahí ser internados en la zona de Las Cañadas, donde se ubica el mayor número de unidades de la Secretaría de la Defensa Nacional".

La movilización militar es evidente en los caminos vecinales de municipios rebeldes como San Pedro de Michoacán, Ricardo Flores Magón, Emiliano Zapata y Francisco Gómez. Las autoridades de este último informaron, mientras tanto, que todo el esfuerzo de las bases de apoyo del EZLN está en preparar las celebraciones del sexto aniversario del alzamiento, de manera pacífica.

La versión construida por Montoya Liévano incluía el asesinato de la esposa del presidente municipal de San Juan Cancuc por "encapuchados", así como la ocupación de una clínica rural del IMSS en Altamirano. El primer caso resultó un homicidio por cuestiones familiares; respecto al segundo, miembros del municipio autónomo 17 de Noviembre negaron que estén preparando "tomas" de clínicas, como la que les atribuye el gobierno estatal.

Si bien distintas versiones periodísticas, y la observación de este enviado, coinciden en que las movilizaciones de soldados son intensas en estos días, la séptima Región Militar sólo informó sobre prácticas escolares de las fuerzas armadas. Según sus voceros, y "en conformidad con el plan general de educación militar, las escuelas de Infantería, Caballería, Artillería y Blindaje, de formación de clases, de paracaidistas y fuerzas especiales realizarán ejercicios de aplicación táctica correspondientes al ciclo de entrenamiento este año" en Chiapas y otras siete entidades federativas.

 

Ensalada de versiones y rumores

 

Alguien quiere jugar con fuego este fin de año en Chiapas. Mientras las autoridades federales niegan que existan operativos especiales, estados de alerta y previsiones de violencia, la séptima Región Militar y el gobierno estatal ponen a rodar sus fichas, "preventivamente"; según el procurador Montoya Liévano.

A partir de "denuncias", procedentes del Valle de Santo Domingo, Ocosingo y de las comunidades de Chenalhó donde prevalecen los paramilitares priístas, como Chimix y Los Chorros, el gobierno de Albores Guillén está soplando las brasas que se suponen controladas. Según las sugerencias del abogado de los chiapanecos, la matanza de Acteal sería conmemorada por una especie de contramatanza, es de suponer que vindicativa, por parte de las víctimas.

Si bien no existen evidencias de un "ala radical del zapatismo", son claras (esas sí) las acciones ofensivas de los paramilitares en Tierra y Libertad, Chenalhó y Tila, así como los desplazamientos continuos de policía y Ejército en los Altos y la selva Lacandona.

El propio Congreso estatal criticó el anuncio del procurador, y hasta los hoteleros se sacaron de onda. Debido al estado de alerta anunciado por Montoya y De la Torre, "se suspendieron los vuelos internacionales que tenían como destino Chiapas esta temporada vacacional", informaron los prestadores de servicios turísticos.

Habrá que agregar a esta "alerta" el ambiguo manejo que se ha dado, a nivel estatal, del asalto al penal de San Cristóbal en días pasados. Si bien las autoridades federales negaron que se tratara de una acción de los zapatistas, los voceros de Albores lo incluyen en su paquete de "suposiciones". La fracción parlamentaria del PRD en la Legislatura chiapaneca llamó al presidente Ernesto Zedillo y al gobernador Roberto Albores Guillén a que "dejen de jugar a los rumores" y respeten la tregua que existe con el EZLN, según consigne también Cuarto Poder en su edición de hoy.

El propio gobierno de Chiapas no acaba de ponerse de acuerdo. Ayer, el delegado regional en Comitán, Franco Torres Vera, insistió en el "nerviosismo" que existe en las comunidades priístas "ante el rumor de que bases de apoyo del EZLN pretenden transgredir el orden y la convivencia social".

Al mismo tiempo, el procurador estatal, Eduardo Montoya Liévano, descartó la existencia de campos de entrenamiento, y de movimientos de grupos armados en la entidad. En contradicción con sus declaraciones de anteayer, Montoya dijo:

"Hasta el momento, la situación en el estado es de total tranquilidad, y son sólo rumores sobre los supuestos ataques a comunidades que han retornado a la institucionalidad, pero se realiza una labor preventiva. Chiapas no vive momentos de violencia, a excepción de los hechos delincuenciales, pero nada que provenga de algún grupo armado insurrecto".

El oficial responsable del puesto de revisión del Ejército federal en Guadalupe Tepeyac, de apellido Almejo, dijo a La Jornada: "Todo está tranquilo, esperamos que así siga. Lo que nosotros queremos es que esto termine y podamos regresar a nuestras casas".

Al mismo tiempo, el incremento de tropas, patrullajes y puestos de control en las carreteras chiapanecas hace una desafortunada mezcla de estado de alerta y temporada vacacional que viene a calentar lo que, se supone, las autoridades están tratando de enfriar.