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Las salas de redacción cambiaron mucho con el fax. Hace algunos años, los colaboradores se reunían bajo una nube de humo en los días de cierre. A muchos los conocimos en las diversas redacciones donde nuestros textos seguían la suerte de la publicación o el basurero. Ahora, nuestra oficina es una colmena donde zumban los faxes, y nuestra computadora una fosa séptica electrónica donde se sedimentan los incontables mensajes del Internet. Estamos en la era de los suplementos telefónicos, de modo que toda encuesta de opinión debe hacerse a través de las fibras ópticas y del sistema auditivo que tiene un nombre ideal para las inquisiciones: true voice. Por alguna razón insondable, nos preocupó saber cuál era la mayor influencia de nuestros colaboradores; y no nos referimos sólo al previsible Autor del Siglo, sino a cualquier cosa digna de impulsarlos, de los estupefacientes a los ojos de Salma Hayek. Las encuestas telefónicas producen una sensación de sinceridad total, tal vez porque no vemos al interoluctor responder en su piyama de borreguitos mientras se rasca el pie. Las voces parecen más auténticas mientras más invisibles son los cuerpos que las emiten. El caso es que de lunes a jueves oímos confesiones en todas las tesituras. Entre los principales estímulos de nuestros colaboradores, fue posible hallar a Franz Kafka, Paul Klee, el masaje tailandés, el telefonazo de un editor, la magdalena de Proust, el Valium, los lentes de John Lennon, Albert Einstein, la bilirrubina, el Tafil, Mel Gibson, el tequila, Julio Cortázar, Woody Allen, el dinero, la mariguana, Mick Jagger, Brigitte Bardot, Hermann Broch, Alcohólicos Anónimos, el cigarro, las becas del FONCA, el psicoanálisis off-off Freud, Winona Rider (menores de 30 años), Michelle Pfeiffer (mayores de 30 años), Paul Auster (menores de 30 años), Raymond Carver (mayores de 30 años). La lista incluyó fuentes de inspiración tan abstrusas como "el premolar levemente desviado de Beatriz" o "la pérdida de mi canario Bubi". No faltó el discípulo de Knut Hamsun que dijera "el hambre" (aunque respondió por teléfono, la solemnidad de su respuesta nos hizo pensar que está gordísimo). La farmacopea y la biblioteca ideales escapan a toda clasificación. De cualquier forma, en el torbellino de pasiones que influye en nuestros colaboradores hubo un indiscutible primer lugar: el café. Sin mayores exageraciones, podemos decir que La Jornada Semanal es un medio para transformar el café en periodismo. Ya Balzac se había referido al influjo del café en la creatividad. El maratonista de la Comedia humana escribió: "El café ejerce un poder determinante en mi vida. He estudiado sus efectos en una escala épica[...] He descubierto un método más bien brutal que sólo le recomiendo a los hombres de vigor excesivo, hombres de grueso pelo negro y piel cubierta de manchas hepáticas, hombres con grandes manos cuadradas y piernas en forma de bolos de boliche. Hay que usar un café espeso, finamente molido, y tomarlo frío y en ayunas[...] A partir de ese momento todo se agita. Las ideas se ponen en marcha como el batallón de un gran ejército en pos de su legendario campo de batalla[...] Tomado en estas condiciones maestras, el café te trasporta a un estado que puede confundirse con la furia: la voz se alza, los gestos sugieren una impacienca insana, se desea que todo avance a la velocidad de las ideas; uno se vuelve brusco, malhumorado por cualquier cosa; uno se transforma en el trémulo personaje condenado por los verduleros: el Poeta. Y uno asume que los demás tienen la misma lucidez. Por eso, un hombre de espíritu debe evitar mostrarse en público."
Una Rosa es una rosa
De acuerdo con Paul Bowles, el citadísimo verso de Gertrude Stein "una rosa es una rosa es una rosa" tiene el siguiente origen. Stein conocía a una familia campesina, que vivía no muy lejos de París. La hija se llamaba Rosa y en una ocasión Alice Toklas, compañera de la escritora, dijo: "Rosa es una rosa." "No sé como surgió la tercera rosa dice Bowles. Supongo que ella consideraba la frase misma como una rosa." Así, la mujer, la flor y el verso se fundieron en la más célebre tautología poética: "una rosa es una rosa es una rosa".
Monterroseana
Nosotros: Ya sabes que hay vida en Marte? Monterroso: ¡Pues hay que poner una librería! |
Un fantasma para el Emperador El Emperador en persona juzgaba los casos y dictaba las sentencias. Su crueldad era legendaria. No había leyes ni abogados, sólo el ojo y la voz del que manda y es obedecido. Una tarde en la sala de justicia del Palacio, en uno de esos actos de capricho y barbarie que llamaban juicios, da comienzo nuestra historia. En el ambiente estaba la solemnidad de la muerte a manos de los verdugos anatomistas. Dos acusados comparecían ante el Inexorable. El primero fue un hombre acusado de ser ermitaño y rezar escondido en una cueva del desierto, cosa prohibida porque nada debía ocultarse al recelo del Emperador. Qué tienes que decir? preguntó displicente el Tirano. Atrás, hijo de Sodoma vociferó el ermitaño, has colmado la Tierra con el vino de tus iniquidades, y el estruendo de tus horrendos pecados ha llegado hasta el cielo, pero, raza de culebras, se acerca el dragón que habrá de masticar tu cabeza, ya oigo batir sus alas negras en el palacio... El Emperador tuvo miedo. En lo sobrenatural se movían fuerzas extrañas que ni él mismo con todo su poder podía gobernar. Regresen a este hombre a la cisterna ordenó en voz baja y que nadie lo toque. Un alto funcionario enano anunció el segundo caso: Esta mujer está acusada de ser mágica y practicar la hechicería. Se dice que tiene el poder de invocar y hacer aparecer fantasmas. El Emperador pareció interesarse en ella y le preguntó: Tú sabes traer fantasmas? Sí, señor respondió tímida la acusada. Y sabes que está prohibido bajo pena de muerte esa hechicería? Sí, señor. Vaya, vaya comentó sonriendo el Divino, una mujer honrada que acepta sus culpas. Voy a darte una oportunidad: llama un fantasma; si lo traes aquí delante de nosotros y podemos verlo, te perdono y puedes irte desterrada a las montañas, pero si no puedes traerlo, mueres en tortura lenta. Gracias, señor. Sonó la música de tambores, la mujer caminó al centro del salón y empezó a bailar. Muchas cosas sucedieron en el largo ritual de invocación, el cielo mudó de color, se visualizaron fugazmente gran número de extraños animales, la mujer misma se transformaba bailando en otras mujeres y recitaba conjuros en idiomas desconocidos. Pero nada, el fantasma no venía. Era llamado, pero no venía. Finalmente, los ruidos y fugaces apariciones cesaron. La mujer se quedó quieta y dijo: No pude, señor, fracasé, invoqué el fantasma de un rey asirio, pero no quiso venir. A todos pasmó el Emperador diciendo: Voy a darte una segunda y última ocasión de salvar tu vida. Vuelve a llamarlo, pero si no viene, vas a ser ejecutada ante la gente y, como ya sentencié, lentamente. Gracias, señor. La mujer giró sobre ella misma, atronó la música y la hechicería volvió a dar comienzo. Esta vez fue diferente el baile y otras cosas sucedieron: todas las flores se hicieron azules y se visualizó una bandada de loros, y la mujer, asombrosamente, crecía y se agigantaba y luego bruscamente se achicaba a delicada miniatura danzante, y las voces en idiomas desconocidos eran nuevas y nunca oídas. Pero nada, el fantasma era llamado pero no venía. Al fin la mujer, agotada, se quedó quieta y habló: Señor, fracasé, invoqué el fantasma pero no quiso venir. Que la ejecuten mañana al amanecer ordenó con desdén el Emperador, lentamente y ante la gente. El guardia avanzó hacia la mujer. Ella esperó quieta. Iba a tomarla del brazo para conducirla al calabozo, pero no la podía aferrar. Quiso apretar el cuello, pero ahí no había nada. Se arrojó sobre la mujer y traspasó limpiamente el aire que ocupaba. Qué pasa, qué pasa? preguntaba impaciente el Emperador. Es que no está, señor, no está gemía el guardia. Cómo que no está, la estamos viendo, ahí, ahí... Me están viendo explicó con calma la mujer, es cierto, pero yo estoy muy lejos, en las montañas hasta donde tu furia no puede llegar. Lo que estás viendo, inmundo entre los inmundos, es un fantasma, un fantasma de mí misma que yo envié con conjuros a ti para decirte: Has sido pesado y hallado falto y son ya muy pocos tus días. Ahora, adiós. El Emperador retrocedió aterrado cuando la mujer, sin decir otra palabra, desapareció.
Vida en Marte
Poco después de terminar la entrega de "La Jornada Virtual" anterior, apareció una noticia que parecía confirmar nuestras predicciones respecto de la función del cine como oráculo. Tras la euforia con los extraterrestres de filmes como Día de la independencia, se descubren evidencias de que hubo vida en Marte. Por supuesto que aún no se trata de seres verdes o grises con seis dedos e inmensos ojos capaces de cambiar de color, sino de microorganismos (seres unicelulares semejantes a bacterias) que vivieron hace 15 millones de años y que llegaron a la Tierra a bordo de un meteorito que se desprendió del planeta rojo, en un tiempo en que éste era más tibio y húmedo. El 11 de junio de este mismo año, el New York Times reportó que los astrónomos de la Universidad de Illinois en Champaign-Urbana, detectaron mediante el radiotelescopio moléculas de ácido acético es decir, de vinagre en una nube de gas (Sagitario B2, localizada a 25 mil años luz de la Tierra) cercana al centro de la Vía Láctea. Este ácido, combinado con amonia (que existe en el espacio interestelar), puede producir aminoácidos, elementos básicos para construir el ADN. Cualquier paranoico podría pensar que se nos está dosificando la información acerca de la vida en el espacio. Qué revelación sigue?
La red de los secuestrados
Antes estaba de moda ver ovnis, ahora lo está ser secuestrado por ellos. El número de casos de abducciones alienígenas ha aumentado de manera impresionante en los últimos años, hasta convertirse en una de las obsesiones favoritas de la cultura popular. Esto hace pensar o bien que la Tierra es una especie de bioterio a la disposición de extraterrestres, o que estamos atravesando un caso agudo de histeria masiva cuyo alcance, gracias a los media, es planetario. Cientos de personas en todo el mundo han declarado con toda seriedad que fueron objeto de crueles experimentos por seres de otros planetas, que van desde la observación hasta mutilación, implante de sensores, inoculación, violación y una variedad de procedimientos quirúrgicos más apropiados para la imaginería gótica que para una civilización tecnológicamente superior, que por alguna razón muy poco científica lleva por lo menos 30 años realizando las mismas rutinas crueles. Qué será lo que todavía no entienden de nosotros? Aunque, como es bien sabido, muchos de los secuestradores no pueden recordar su triste contacto cercano del tercer tipo, para ellos la red ya ofrece una manera de confirmar sus sospechas, en http://www.cybergate.com/ufonline/52questi.htm, donde se hacen 52 preguntas para ayudar a deteminar si uno ha sido secuestrado. Otros marcianos, otras paranoias
Para quienes, en cambio, piensan que los marcianos son seres bondadosos que vienen a salvarnos de nosotros mismos, es recomendable que visiten el sitio del Centro de Estudios de la Inteligencia Extraterrestre: http://www2.ari.net/home/celestar/cseti.html. A quienes desean profundizar en el tema, les recomendamos recorrer los siguientes sitios:
http://www.citadel.co.uk/citadel/eclipse/futura/bufora/misc/link /link.htm http://algonet.se/ufo/english.html http://ernie.bgsu.edu/jzawodn/ufo/ http://www.cee.hw.ac.uk:80/~ceewb/fsr/(prohibido desde algunos servidores). Para encontrar referencias a muchas otras conspiraciones recomendamos: http://www.teleport.com/~dkossy/ (el célebre museo de Donna Kossy) http://www.knowledge.co.uk/xxx/cat/aeon http://www.utu.fi/~jounsmed/asc/asc.html http://www.awpi.com/ConspiracyWeb/index.html
Vuelo 800 en peligro
Finalmente, una vez más la red se ha adelantado a los demás medios de comunicación. La noche del 17 de julio, cuando aún no terminaban de extinguirse las llamas de los escombros del avión de TWA que flotaban frente a la costa de Long Island, ya se había creado por lo menos un sitio en el WWW con información actualizada de la tragedia. Al escribir esto, aún se desconocía que fue lo que pasó en ese vuelo Nueva York-París, pero la teoría de una bomba seguía dominando el panorama y el gobierno de Bill Clinton de hecho ya culpaba sin tener la menor evidencia (a través del secretario de Defensa William Perry) a Irán y a Libia. Clinton no tardó mucho en aprobar una ley que pretende castigar a estos países penalizando a cualquier empresa que invierta en ellos. Mientras tanto, en varios medios circulaba el rumor de que uno de los sistemas de defensa aérea del ejército estadunidense confundió al jumbo, perdió el control y disparó un misil. De acuerdo con el periodista Alexander Cockburn, hace 25 años un avión de Air Lingus que viajaba de Cork a Londres, corrió con una suerte semejante a la del vuelo 800 y desapareció en el océano. Nunca se explicó el accidente, pero se rumora que el ejército británico lo derribó accidentalmente cuando uno de sus sistemas de defensa falló de manera fatal. Una conspiración más para añadir al museo de la paranoia.
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